A seis kilómetros de la cabecera cantonal de Pindal, por la vía a Paletillas, el río San José, en el poblado que lleva el mismo nombre, se ha convertido en un ícono turístico del cantón. Sus cristalinas aguas, el clima templado, la vía en buenas condiciones y la exuberante vegetación de la zona son las características que gustan a los centenares de turistas que lo visitan.
Es común observar a jóvenes, adultos, adolescentes y niños visitan el río para disfrutar de la frescura de sus aguas.
La Municipalidad del cantón debería poner los ojos en el otroro primer balneario de Pindal, pero por abandono de las anteriores administraciones el sector ha quedado relegado a segundo plano por quienes gustan del paseo en familia, el baño y la pesca. El río San José debería tener el apoyo de la administración municipal para convertirse en una alternativa para el turista que visita el cantón, puesto que en temporadas altas la Piscina Natural de Pindal se pone a reventar donde no cabe ni una aguja.
Recorrer el río haciendo gala de buen nadador es, entre otros, un momento de emoción.
Los mas pequeños aprovechan el espacio del río para practicar técnicas de natación como el clavado.
Compartir entre amigos mientras se aprecia la belleza del lugar, son instantes que a los visitantes les agrada.
Foto 1. Entre las bondades del río, está el bienestar que siente el bañista al aprovechar su abundante agua.
Foto 2. El turista desea llevar recuerdos y entre chapuzón y chapuzón guarda el momento en el río San José.
martes, 5 de enero de 2010
San José es un imán para el turismo
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