Es hora de la unidad

Por: César Sandoya Valdiviezo
El triunfo arrollador del candidato del Movimiento PAIS, Bolívar Jumbo, sobre su principal contendor, Germán Sánchez González, de Conciencia Ciudadana, no debe ser entendido como una victoria de una corriente ideológica.
Hay que tener el suficiente sentido común y olfato para percibir el mensaje que el pueblo de Pindal dio en las urnas. La gente se cansó de una forma de gobernar propia de la partidocracia y en su lugar demanda una verdadera democracia, un gobierno local incluyente, justo y solidario.
Hay que terminar con las viejas prácticas, donde la mayoría de políticos están acostumbrados a vender ilusiones, a generar falsas expectativas, sin concretar nada en el periodo o periodos que asumen el cargo, por eso viene luego el desencanto popular.
El triunfo de Bolívar Jumbo en Pindal debería llevar a una etapa de profunda reflexión en torno a la inmensa responsabilidad que significa el hecho de que la gran mayoría de ciudadanos haya decidido confiar en su mensaje. En democracia no solo se gobierna para los amigos y familiares sino para todos, porque hay que recordar que otro sector escogió otras opciones, por lo que es necesario también tomarlos en cuenta. El Alcalde electo se debe esforzar por construir un liderazgo que incluya a todos, sobre la base de una actitud ética, tolerante y serena.
Hay que abrir un diálogo sin imposiciones de nadie ni condicionamientos, ni boicot de otros, con el objeto de lograr un acuerdo mínimo con la participación de todos los sectores. Aunque no implique renunciar a posiciones político-ideológicas, el primer paso debería ser la convocatoria a diálogo para buscar consensos en determinados temas básicos de interés general.
Ahora que terminó la campaña política, llegó la hora de la unidad. Es hora de despojarnos de ideologías y camisetas multicolores para portar la única bandera que debe cobijar a todos los pindaleños: la verde, blanco y verde. El triunfo en democracia debe ser recibido con humildad, sin prepotencia ni imposiciones a la fuerza. Entonces, en sus manos está, Señor Alcalde electo, en convocar a la gran concertación para la unidad cantonal que apunte a posicionar un Pindal pujante y progresista que forje su propio destino de grandeza.